¡Ay que ver que mala leche tiene algunos!

Cuando alguien se queda sin argumentos, cuando le fallan los principios, cuando la moral es la del corrupto, se permite todo tipo de licencias. Los desmanes del ignorante le conducen al atrevimiento de la amenaza, del juego sucio con la intimidad de las personas. Si, vigilando-vigilando, los secuaces de la ignonimia quieren pillar a l@s que aquí escribimos siempre me queda resarcirme: Mejor que nos pille un buen momento que lo haga la Guardia Civil.