viernes, 1 de abril de 2011

Vamos a ver, vamos a ver...que creo que aquì, hay gente confundida...decir que no al matrimonio homosexual, por una cuestiòn puramente visceral, vale, evidentemente no lo comparto...pero lo puedo entender... pero de ahì a que alguien diga, que el matrimonio es una cuestiòn o religiosa, o simplemente cultural, ahí, estamos confundiendo tèrminos: El matrimonio,es un juramento indisoluble, segùn los principios de la iglesia, ante Dios y la comunidad.. pero tambien es un contrato civil, ambos, pueden ser celebrados conjuntamente.. o no. (acabo de descubrir Amèrica) Asì es, que tenemos dos opciones de matrimonio y plena libertad de elegir. Es cierto que nuestra tradiciòn cultural es cristiana, pero ademàs y antes de eso fuè clàsica. Nuestros principios sociales, nuestra democracia, nuestro sentimiento estètico es clàsico...Y por si acaso alguien no me entiende:.. clàsico...de la Grecia Clàsica...Y en aquella sociedad, culta, y creyente, la homosexualidad, no era interpretada si no con naturalidad, y en algunos polis pongamos como ejemplo Esparta entre sus hoplitas (..y esos si que eran durosquenoveas..) una obligaciòn y un deber...por lo que, siempre bajo mi humilde punto de vista, aferrarse a nuestra cultura, para denigrar el matrimonio homosexual, no se sostiene... En fin, no me hagais caso, es viernes..y ya sabeis...soy rubia...

1 comentario:

  1. No no se sostiene,creo que la cuestión cultural no es la que crea el rechazo, sino la cuestión religiosa, pues es esta la que determina la cultura de cada sociedad.En en un país,cuanto mayor es el arraigo a una determinada religión nenos libres son sus ciudadanos, por eso es la oposición al matrimonio homosexual, porque al fin y al cabo se trata de un derecho.

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